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Universidad Centroamericana - UCA  
  Número 330 | Septiembre 2009

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Honduras

Otro mes bajo el golpe de Estado: “Oigo un ruido que suena...”

El 28 de mayo Honduras sufrió el peor terremoto en décadas: 6.1 Richter. Un mes después, el 28 de junio, se produjo otro sismo, mucho más violento que el geológico, que aún nos mantiene temblando de angustia. Son muchos los sentimientos que se agolparon en este segundo mes bajo el golpe de Estado: amargura, incertidumbre, impotencia, repulsa, agotamiento, indefensión... También alegría y esperanza.

Alejandro Fernández

1 DE AGOSTO:
¿PARTO O AGONÍA?

La violencia ejercida por la policía y el ejército sobre los manifestantes que protestaban pacíficamente en Tegucigalpa en la mañana en que se cumplía el primer mes del golpe de Estado amenaza con provocar un salto cualitativo en la crisis que vivimos... Los empresarios comienzan a hartarse de la “necedad” de quienes no aceptan el orden surgido el 28 de junio. Quizás por eso entre las fuerzas represivas van francotiradores. Una de sus balas atravesó la cabeza de un maestro de 38 años, que tras debatirse entre la vida y la muerte por 24 horas, falleció esta madrugada. Ayer también hubo intercambio de disparos en una manifestación de protesta en Choloma, la tercera ciudad del país en número de habitantes...

Uno de los pocos periodistas independientes del país, Manuel Torres, se preguntaba hace unos días si esto que estamos experimentando son dolores de parto o de agonía, si obedecen a que algo está naciendo o a algo que muere. Quisiéramos compartir el optimismo de Torres puesto que en ambos casos, cuando algo nace o cuando algo muere para dejar paso a otra cosa, es la vida la que se abre paso...

¿Es posible que esté naciendo una nueva conciencia ciudadana? Sin duda. El hondureño de hoy no es el de hace una década. La globalización le ayuda a salir de su aislamiento provinciano y a manejar mucha mas información que antes. Pero el subdesarrollo político es el mismo. Llama la atención que entre la juventud de clase media nadie está interesado en defender el estado de derecho de su país. Son conceptos ajenos a una clase social que vive con un pie en Miami y el otro en sus negocios, un joven empresariado que para prosperar, más que seguridad jurídica, precisa de buenos contactos entre la camarilla que dirige la nación...

Durante la última semana Micheletti bajó su perfil público. Quizás sus asesores le han recomendado sabiamente un discreto segundo plano, a sabiendas de lo poco que ayuda al régimen de facto su apabulladora impopularidad...

Mel también ha disminuido su actividad en la frontera nicaragüense y ha anunciado un “enmontañamiento” que cuesta trabajo imaginar en qué consiste. Más que la hipotética guerrilla zelayista, preocupa a los golpistas que les retiren las visas. En la “Vie de France”, cafetería que se ubica a cien metros de casa presidencial, no se habla de otra cosa. Eso sí toca al régimen en su punto más vulnerable.

Mucho más activa que su esposo se ha mostrado doña Xiomara Castro de Zelaya y su hija, conocida por todos como “la Pichu”. Ha recreado una historia de amor fronterizo propia de los Tigres del Norte, aun cuando todo el mundo sabe en el país que la pareja presidencial es solamente eso: una pareja que se nutre de las canonjías que conlleva la Presidencia de la República y no de sentimientos más íntimos... Ayer regresaron a la capital la esposa y la hija del mandatario depuesto. Al filo de la medianoche, en Radio Globo, la hija del presidente estrenó su voz como cantante en vivo, entonando un tema muy recurrido en estos días: “Nos tienen miedo porque no tenemos miedo”.

UN BAILE DE MÁSCARAS

David Romero, director de Radio Globo, convertido en la voz de los que no transigen con este gobierno impuesto por las armas, es uno de los periodistas más corruptos del país. Desde que por los años 80 comenzó a recibir dinero de parte de los militares, nunca dejó de venderse al mejor postor en un país donde la prensa tarifada ha sido una constante vergonzante para su joven democracia. Romero era diputado suplente en el Congreso Nacional y estaba en la cumbre de su carrera cuando su hija de 23 años decidió denunciar ante el Centro de Derechos de la Mujer los vejámenes sexuales de que era objeto desde los diez años por parte de su padre. Corría el año 2002 y el periodista terminó con sus huesos en la cárcel. En este país, donde todo parece olvidarse a la vuelta de la esquina, David Romero es ahora el paladín de la noble causa de la democracia. De este material tan débil y maleable están hechas las estructuras de la resistencia pacífica a este golpe de estado. La conversión democrática de David Romero es una de las tantas paradojas que encierra esta crisis, que por ratos se parece a un enorme baile de máscaras. Nunca sabes bien quién se esconde detrás de tal o cual posición.

La polarización continúa profundizándose, aun cuando los motivos ideológicos aparezcan cada vez más imprecisos. Las acusaciones de uno y otro lado se multiplican. Una de las más graves fue la que surgió esta semana en contra de los promotores de la resistencia. Se dice que se han encontrado pruebas de que las actividades de protesta se están financiando y no son tan genuinas como parecen. Hay quien asegura haber visto cómo se reclutan jóvenes desempleados para llevarlos a los plantones. Mucho más numerosas han sido las denuncias contra los que organizan concentraciones a favor de Micheletti: se obliga a las muchachas de las maquilas a ponerse la camiseta blanca y a salir a la plaza pública envueltas en banderas. Probablemente en ambos bandos exista manipulación a la hora de salir a las calles. No puede ser de otra forma en un país donde el clientelismo es para muchos el único modo conocido de hacer política.

Eso no quita para que mucha gente de la que sale a diario a protestar, y muchísima de la que no se encuentra cómoda en las calles pero expresa su descontento en privado, esté “despertando” a la verdadera naturaleza de la clase política de este país.

4 DE AGOSTO:
LA CLAVE DE LECTURA ES LOCAL

Mañana se inicia en Honduras la que se ha dado en llamar Marcha Nacional por la Institucionalidad, que durará aproximadamente una semana. Desde diferentes lugares del país saldrán grupos caminando hacia las dos principales ciudades, Tegucigalpa y San Pedro Sula...

Hay quien argumenta que en Honduras se juega una batalla de la nueva guerra ideológica entre el Imperio y el Socialismo del siglo 21. Aducen que la embajada gringa ha propiciado en nuestro país un enorme laboratorio donde ensayar las nuevas estrategias de la derecha republicana del país del Norte. Sin negar por completo las conexiones de los golpistas con actores extranjeros -aliados incondicionales de la oligarquía criolla- nos inclinamos a pensar que para entender los acontecimientos sucedidos en Honduras en los últimos meses es preciso leerlos en clave de política vernácula. Dice Matías Funes -quien fue primer candidato de la izquierda a la Presidencia en unas elecciones democráticas- que esta crisis hondureña será objeto de tesis de académicos de todo el mundo. Y es que no cabe duda que lo que aquí sucede no se puede entender aplicando sencillas ecuaciones ideológicas, como acostumbran a hacer supuestos aprendices de politólogos, que prefieren traicionar la objetividad antes que reconocer su confusión ante acontecimientos complejos que los sobrepasan.

Produce sonrojo e impotencia comprobar que entre ellos está Ignacio Ramonet, a quien profesamos admiración y leemos desde hace más de veinte años. En un artículo publicado en “Rebelión”, titulado “Con profundo gozo”, realiza una descripción sorprendente de Zelaya, de sus hechos y sus intenciones, que sólo se puede justificar desde la ignorancia o el desprecio hacia el rigor histórico.

Mel Zelaya ha sido un presidente nefasto, rodeado de uno de las mayores camarillas de corrupción que se recuerdan en el país, que ya es decir… Gobernó caóticamente durante tres años y se enfrentó con su propia clase social no en virtud de una supuesta conversión ideológica, sino a causa de su voracidad y avaricia... No abona en nada a la solución subirnos al carro de un Presidente con una concepción del Estado tan patrimonial como sus más feroces enemigos. Necesitamos que vuelva Zelaya, pero para empezar a reconstruir sobre la vuelta a la constitucionalidad, nunca para festejar sus disparates ni disculpar sus fechorías.

El ejército dijo hoy aceptar el acuerdo de San José. Mel también lo acepta. ¿Se llegará a un arreglo? Entre esta noticia y la fuerte protesta que se espera para mañana vuelve a renacer el optimismo. El acuerdo de San José sería la mejor noticia que en estos momentos podría caer sobre la República.

6 DE AGOSTO:
ZELAYA ALENTÓ A LOS MILITARES

Desde el retorno al orden civil en el año 1980 ningún mandatario había ayudado tanto a elevar el perfil de los militares como lo hizo Mel Zelaya en sus tres años de gobierno. Además de otorgarles concesiones financieras que no recibían desde los años 80, triplicó su presupuesto. Sobre todo, alentó a los jerarcas del ejército a abandonar su neutralidad, que tanto había costado construir, para que expresaran opiniones partidarias a favor del gobierno del Poder Ciudadano.

La desmilitarización de la sociedad, iniciada por el Presidente Reina y continuada por sus sucesores sufrió una fatal involución durante el gobierno de Zelaya. Es evidente que Mel pretendía asegurarse un poder fáctico ante la paulatina pérdida de apoyos entre sus adversarios políticos. De poco le sirvió al Presidente su derroche de atenciones. Pase lo que pase en Honduras, el próximo gobierno civil tendrá que emplear energías y recursos para volver a confinar a sus cuarteles al ejército...

Zelaya parece alejarse de la órbita de Chávez y Ortega, acercándose al mexicano Felipe Calderón y siguiendo aparentemente un guión establecido por Washington, que tendría como final reponer al mandatario, pasando por el tamiz político del acuerdo de San José.

El retorno con condiciones de Zelaya es el final más factible para esta crisis. A juicio de una parte de las fuerzas golpistas -cuya unidad está hoy claramente resquebrajada- esta salida volvería a hacer posible la gobernabilidad, tras desactivar las -según ellos- peligrosas inclinaciones de Zelaya. En este escenario, Zelaya regresaría al poder maniatado y observado de cerca por la comunidad internacional. Si esta opción no se ha tomado todavía es seguramente porque una parte de la oligarquía desconfía profundamente de Zelaya y teme que una vez devuelto a la silla presidencial, rodeado de un pueblo que está protagonizando su mejor gesta histórica, sea capaz de dar un giro inesperado a los acontecimientos y dañar seriamente sus intereses. Pero el empresariado está asustado y necesita mover ficha...

Quizás la ciudadanía esté confusa, pero lo cierto es que ha perdido el miedo. Camina hoy por segundo día consecutivo hacia Tegucigalpa y San Pedro Sula. Unas dos mil personas pernoctan a estas horas en la aldea Las Flores, a 15 kilómetros de Comayagua y a tres días de camino de Tegucigalpa. En otros lugares del país se junta más gente. Dicen que en Santa Bárbara se puede hablar de cinco mil personas. A medida que la caravana avanza se van incorporando mas hombres y mujeres. Muchas de estas gentes superan los 60 años y han votado toda su vida por el bipartidismo, pero ahora se sienten traicionadas por la clase política y quieren llegar hasta el final con sus demandas. ¿Cómo capitalizar esta semilla de descontento y esperanza en una propuesta para un país diferente?

TODOS SE EQUIVOCARON

Los escenarios se han vuelto tan impredecibles que todos parecen equivocarse. Se equivocó Mel Zelaya cuando pensó que podía enfrentarse a las fuerzas más poderosas de su propia estirpe, amparado en la supuesta lealtad de las fuerzas armadas, a quienes mimó hasta el extremo. Se equivocaron los empresarios afectos al golpe de Estado, cuando creyeron que la situación se resolvería en una semana. Se equivocó el Cardenal Rodríguez cuando calibró que su voz inclinaría definitivamente la balanza de la comunidad internacional hacia los golpistas. Se equivocó Elvin Santos, el candidato liberal, creyendo que con su distanciamiento de Zelaya terminaría por atraer hacia sí a los liberales descontentos. Se equivocó el ejército creyendo que con los medios de comunicación a su favor la población terminaría por vitorearlos como antaño…

Muchas equivocaciones y muy pocos aciertos. ¿Bagaje suficiente para esperar un país mejor cuando todo esto acabe? Habrá que esperar hasta el próximo noviembre para vislumbrar una respuesta. Ahí veremos si el bipartidismo ha sufrido grietas profundas o si sale indemne en sus estructuras fundamentales. Si como se supone a estas alturas, la abstención se dispara y las fuerzas opositoras agrupadas en torno al independiente Carlos H. Reyes consiguen un buen resultado, tendremos que hablar de un nuevo paradigma en la historia política del país.

8 DE AGOSTO:
LOS GRAFITIS HABLAN

A partir de ayer se sumaron a la protesta los taxistas. Habida cuenta de que hay más de 7 mil sólo en la capital y que miles de personas utilizan los taxis colectivos para desplazarse a sus labores, el paro vehicular puede afectar seriamente la pretendida normalidad que ya no se sostiene.

Aunque quizás sean los grafitis en las paredes los que nos recuerdan de forma más elocuente que la lucha contra el gobierno de facto lejos de agotarse se renueva cada día. La catedral es uno de los edificios preferidos por los aficionados a expresarse en las paredes. Sobre un otrora impoluto color salmón destacan frases que se mofan del cardenal Rodríguez o lo acusan de ser el Anticristo. Las autoridades tratan de cubrir a diario los insultos y devolver a la iglesia su color y su dignidad, pero no resulta fácil combatir contra los rápidos sprays que regresan noche tras noche. En un grafiti digno de figurar en “La vida de Brian” alguien escribió el martes pasado: “No pintes, que mañana vuelvo”.

ZELAYA: APRENDIZ DE BRUJO

Ayer se presentaba en Washington ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) el informe final de una de las misiones de observación internacionales que han visitado Honduras posteriormente al golpe de Estado. Es un documento valioso que ofrece un recuento detallado de las violaciones realizadas por el gobierno golpista durante el primer mes. En el documento se realiza un análisis jurídico pormenorizado que demuestra la inconsistencia de los argumentos que siguen avalando que se actuó ajustado a derecho. No obstante, poco o nada se habla sobre el ambiente de crisis institucional provocado por Zelaya con anterioridad a la asonada.

Como bien habían denunciado Cáritas de Honduras y el Foro Social de la Deuda Externa, en un pronunciamiento público que salió a la luz unos pocos días antes del golpe de estado, la famosa Cuarta Urna suponía un “riesgo de que la institucionalidad se quiebre” ante la manipulación que de los resultados podría hacer un Zelaya “enfrascado en tejer una nueva red clientelista”. Mel no ha sido nunca un adalid de la participación ciudadana, sino un aprendiz de brujo a quien se le fue de las manos un peligroso experimento con el que erigirse como el nuevo patrón de la oligarquía hondureña.

Roberto Micheletti celebró hoy un encuentro con un millar de reservistas de las Fuerzas Armadas que vestidos de blanco, el color de los golpistas, le brindaron su apoyo incondicional. Son manotadas de ahogado de un político que se queda solo y que sólo se encuentra seguro y bien arropado entre los fusiles de las fuerzas armadas. Hemos visto en El Progreso, feudo de Micheletti, a familias de tradición liberal que rechazan al presidente de facto y lo increpan como “viejo loco, ridículo y golpista” cuando sale por el canal de la televisión oficial. Hemos oído a una funcionaria que accedió a su puesto de trabajo gracias a Micheletti decir: “Ese chele es más marero que los mareros a quienes persigue”...

9 DE AGOSTO:
MISA EN QUEBRADA SECA

A las 7 de la mañana, en la aldea Quebrada Seca, a la entrada de la ciudad de El Progreso, varios centenares de hombres, mujeres y niños se disponen a celebrar una misa, antes de desayunar y retomar la marcha. Forman parte de los miles de pobladores y pobladoras que desde diferentes puntos del país emprendieron la marcha el 5 de agosto y que proyectan arribar a las dos principales ciudades hondureñas el 11 de agosto.

La directora de la escuela pública de Quebrada Seca puso a disposición de la marcha las instalaciones del centro de estudios. Se instalaron también cocinas de campaña para preparar los alimentos, pero finalmente no sirvieron más que para hacer café. Lo que sobraba ayer era comida. La solidaridad de los progreseños ha hecho que a nadie le faltaran ni tortillas ni medicinas ni un colchón sobre el que descansar.

El Padre Melo, director de Radio Progreso, y el Padre Juanito Donahue, párroco del lugar, presiden una eucaristía que se parece mucho a una fiesta cívica. La predicación corre a cargo de los peregrinos que llevan días en camino hacia San Pedro Sula. Entre los que suben al estrado para compartir sus sentimientos se encuentra Juan Blas, uno de los dirigentes de aquella otra gesta del pueblo hondureño acontecida en 1954: la gran huelga bananera. Blas era entonces un muchacho que vendía periódicos revolucionarios durante los 69 días de huelga que doblegaron a la todopoderosa United Fruit, dando paso al Código del Trabajo hondureño y cambiando el destino de millones de personas en la Costa Norte.

Esta misa y las muchas acciones de sacerdotes en la resistencia activa desde el pasado 28 de junio es una clara muestra de que hay un sector de la iglesia hondureña que no ha cluaudicado ante los golpistas, ni mucho menos ante aquellos que desde las estructuras jerárquicas del catolicismo los consienten y disculpan.

¿Y LOS VOTOS DE LA IZQUIERDA?

Me encuentro con varios dirigentes de Unificación Democrática, el partido político que en los últimos años ha congregado a la izquierda hondureña. Todos me dicen que no votarán por su candidato presidencial César Ham, quien ha caído en un enorme descrédito después de comprobarse su responsabilidad directa en casos de corrupción al interior de su propio partido. En los últimos meses apareció muy cercano al presidente Zelaya y hay rumores que apuntan a que éste ayudó financieramente a Ham a sortear las dificultades internas y a mantenerse en el poder. Es una historia más de clientelismo político que confirma la tesis del periodista Manuel Torres: el bipartidismo hondureño afecta a los cinco institutos políticos inscritos legalmente. Todos han sido infectados por la misma epidemia de deshonestidad y concepción vertical del poder.

Los votos de la izquierda descontenta se irán muy probablemente hacia el independiente Carlos H. Reyes, un sindicalista de 68 años, que ha decidido lanzar su candidatura por primera vez en las elecciones de noviembre. Reyes no cuenta con posibilidades reales de alcanzar la Presidencia, pero si obtuviera un respaldo significativo, superior al 10% del electorado, podría hacer temblar los cimientos de los dos grandes partidos.

10 DE AGOSTO:
EL BOTÍN DE 10 FAMILIAS

En un nuevo esfuerzo diplomático, la OEA ha conformado una delegación de cancilleres que, solicitó visitar el país a partir del 11 de agosto. Tras varios movimientos dilatorios, el gobierno de Micheletti acepta la visita, pero pospone la fecha. Algunos dicen que es para que los cancilleres no coincidan con la gran concentración prevista para el día 11, cuando llegarán a San Pedro Sula y Tegucigalpa las diferentes marchas que desde hace cinco días recorren la geografía como ríos que van a dar a la mar.

Obviamente, la crisis también salpica a la oligarquía, pero es justo reconocer que ésta cuenta con reservas suficientes que le permiten esperar pacientemente a que cambie la dirección del viento. Analistas nacionales calculan, en base a los datos de Transparencia Internacional, que desde que en Honduras se inició, hace casi 30 años, esta transición fallida a la democracia se han perdido del erario público 800 mil millones de dólares en corrupción. Este capital formidable no sólo ha servido para afianzar la posición económica de las diez familias que gobiernan el país y sus subalternos, sino también una estrategia de supervivencia política que hoy se encuentra amenazada.

En un artículo publicado en el periódico de su familia, “La Tribuna”, Lizzy Flores, hace un llamado a los jóvenes a participar en las próximas elecciones de noviembre. La hija del ex-presidente Carlos Flores afirma: “Las elecciones son una oportunidad para comenzar de nuevo y construir la Honduras que queremos con la participación de todos”. Semejante ejercicio de cinismo político ya no sorprende a nadie. Lizzy -más norteamericana que catracha- es la tercera generación de una de las dinastías más poderosas del país.

Algunos dicen que su padre la prepara para lanzarla a la Presidencia de la República, y otros añaden maliciosamente que le están dando tiempo para que aprenda a hablar bien español. Los artículos que ella firma -no necesariamente que ella escribe- se pueden leer hoy como indicios del pensamiento del segmento más conservador de la política vernácula. Evidentemente, apuestan a que el tiempo pase y las elecciones pongan de nuevo las cosas en su sitio, es decir, que regrese el desorden social que ha convertido a Honduras en una de las naciones más desiguales del planeta. Nada preocupa tanto a la oligarquía como una abstención masiva en las elecciones generales o una pérdida sustancial del apoyo que reciben tradicionalmente los dos grandes partidos, el Nacional y el Liberal.

CARLOS H. REYES:
AHORA O NUNCA

Félix Molina entrevista a Carlos H. Reyes en su casa, donde se recupera de la fractura de muñeca que le causó la policía en los enfrentamientos de hace diez días. No es común que un líder político que se presenta a la Presidencia de la República se exponga a los peligros que conlleva manifestarse contra un régimen sostenido por los militares. Ante los micrófonos de Radio Progreso, Reyes dice algo que a priori suena un poco excesivo, pero que bien pensado quizás pueda ser cierto: “Ahora o nunca”. El viejo líder obrerista sabe que si el pueblo se doblega será difícil volver a contar con otra ocasión como ésta para forzar un cambio en el país.

Esto ya no se trata de una pugna entre Mel Zelaya y Micheletti. Es un pulso entre la rancia plutocracia que no permite que le toquen sus privilegios y una ciudadanía que empieza a despertar de un largo letargo y pretende vivir en un país diferente.

DONDE ESTUVO “MAMITA YUNAI”

La caminata llegó hoy a la ciudad de La Lima, un emplazamiento de alto poder simbólico para el movimiento obrero hondureño. Sobre esta villa se erigió en los años 20 del pasado siglo el gran poder político de Mamita Yunai, de la United Fruit Company.

Todavía hoy podemos encontrar en La Lima una zona vallada, donde los residentes tienen hermosas piscinas,
un elegante club social y un exquisitamente cuidado campo de golf. “La Compañía” -como se la conoce todavía- era mucho más que una empresa. Lo que era bueno para ella era bueno para Estados Unidos. En aquellos tiempos Honduras era el principal productor mundial de bananos y sus trabajadores malvivían en condiciones infrahumanas.

Esta “prisión verde” -en celebre expresión del novelista local Amaya Amador- comenzó a cambiar cuando los trabajadores organizados protagonizaron una de las mayores gestas pacíficas de la historia del movimiento obrero en América Latina. Todos recuerdan el día de hoy la gran huelga de 1954. Muchos llaman a Radio Progreso para pedir que “pinchen” la canción en la que Mario de Mezapa homenajea a sus líderes. A las 4 de la tarde, entre la emoción de la nostalgia y la esperanza en el futuro, comienza en la plaza central de la ciudad limeña un acto cultural...

En el otro extremo de la república los manifestantes aguardan el asalto a Tegucigalpa “velando sus armas”
en el Monte Carmelo, a 10 kilómetros de la capital. Sin palos ni pistolas, van armados de razones y de demandas. Quieren vivir en democracia. Algunos persiguen objetivos inmediatos. Aún confundidos por el populista Zelaya, añoran un presidente que nunca existió. Otros se han dado cuenta de que el derecho a una Honduras digna se les ha robado mucho antes del golpe.

12 DE AGOSTO:
LA CANTINELA GOLPISTA

Escuchamos, como una cantinela interminable, mensajes delirantes en los canales y emisoras afectas a Micheletti, que son casi todas: que muy mal debe andar el planeta para apoyar a un golpista como Mel Zelaya, que Insulza es un pelele manejado desde Caracas, que la OEA es un elefante podrido, que la ONU está en manos de terroristas, que Honduras está dando una lección de democracia al mundo... Bastaría ver las cifras que sitúan a Honduras como uno de los países más atrasados, corruptos y pobres del continente para desafiar esa sarta de barbaridades.

Sorprende pero alienta que tanta gente en Honduras mantenga una actitud de resistencia digna. Es posible que mucho tenga que ver con que algunas de las medidas populistas de Zelaya, especialmente la subida del salario mínimo, hayan calado profundo en la población. Al margen de lo poco inteligentes que pudieran ser esas medidas y, sobre todo, de las espurias intenciones que las ampararon, no se puede desconocer que buena parte de este pueblo se ha cansado de estar sometido a una oligarquía que no consiente ceder lo más mínimo para un reparto más equitativo de la riqueza nacional... La juventud, que suma la mitad de esta nación de 7 millones y medio de habitantes, ya no está de acuerdo con vivir como sus padres y sus abuelos, sojuzgados a una clase política farsante y voraz.

Las caminatas de miles de ciudadanos llegaron ayer como se esperaba a las dos principales ciudades de Honduras. Lamentablemente, en la capital se sucedieron algunos hechos violentos, como el incendio de un restaurante de comida rápida. Son incidentes aislados, y en absoluto empañan una marcha en completa paz que duró una semana... En San Pedro Sula la fiesta fue total. Miles de personas se congregaron para recibir a los peregrinos. Hubo música, consignas, alimentos y esperanzas compartidas. El octogenario padre Fausto Milla, en una misa popular, recordó el derecho del pueblo a la insurrección y calificó de criminal y tiránico al gobierno de facto.

45 días han transcurrido desde el levantamiento militar y ya muchos medios internacionales parecen agotarse en el seguimiento de esta crisis. También al interior hay signos de cansancio. Pero sobreabundan los signos de esperanza.

14 DE AGOSTO:
VIENE UNA DEBACLE ECONÓMICA

Honduras -el tercer país más pobre de América Latina y el Caribe- se encamina hacia un estado de calamidad económica. Enredado en sus patasteras ideológicas y en sus proyectos personales, el Ejecutivo dirigido por Manuel Zelaya no fue capaz de diseñar un plan anticrisis en medio de la mayor recesión económica mundial en décadas. En consecuencia, las remesas enviadas a Honduras por la población migrante, que constituye actualmente el mayor rubro de entrada de divisas, bajaron un 8% en el segundo trimestre. La decisión de aumentar el salario mínimo sin haber llegado a un consenso con la empresa privada provocó que se disparara el desempleo, especialmente en la pequeña y mediana empresa. Llegamos al 28 de junio en la peor situación posible para un pequeño país que no puede hacer otra cosa que amortiguar las sacudidas sísmicas de la crisis financiera mundial.

El gobierno golpista nada ha hecho que pueda suponer una mejora o atisbar políticas económicas más eficaces.
Al contrario, la deuda interna ha crecido aún a un ritmo mayor en estos 47 días. En un país semiparalizado, la industria del turismo y los servicios está duramente afectada por la inestabilidad política. La falta de recursos internacionales frescos, suspendidos como parte de las sanciones externas al régimen de facto, hará muy difícil que en los próximos meses el Estado, el mayor empleador nacional, pueda cumplir sus compromisos con los funcionarios públicos, sin acudir a una drástica devaluación de la moneda. El impacto mayor de esta debacle económica aun está por llegar.

A mes y medio del golpe de Estado, la represión va en aumento. Hoy se conocía que 24 de las personas detenidas en Tegucigalpa han sido acusadas de sedición. También está en marcha un proyecto de ley, introducido al congreso por el democristiano Velázquez Nassar, para que el servicio militar vuelva a ser obligatorio. Cuesta creer que la involución pueda ir tan lejos, pero este régimen ilegítimo ya perdió el rumbo y no mide bien sus decisiones. Es un salto cualitativo para amedrentar a una población que parece haber ganado las calles.

Los momentos más intensos y dramáticos de esta jornada sobrevienen en horas del mediodía. En vivo y en directo escuchamos por Radio Progreso la salvaje represión en la populosa Choloma. La policía atacó a un grupo de manifestantes que cortaban la autopista a San Pedro...

SERGIO RAMÍREZ: SÍ Y NO

Sergio Ramírez, en un interesantísimo diálogo mantenido con los lectores del diario español “El País”, realiza una ponderada lectura de los hechos de Honduras. Reflexiona sobre los graves problemas que acarrea el caudillismo en América Latina, sea de derechas o de “izquierdas”. Lo que se necesita no son poderes políticos fuertes sino instituciones democráticas fuertes...

Ramírez recomienda centrarse en las próximas elecciones. En este punto el escritor no está considerando todas las implicaciones reales del golpe de Estado. No fue un golpe contra los hechos concretos que acaecían en el país ni contra un proyecto denominado Cuarta Urna, sino contra cualquier intento de rebelarse contra una democracia fallida en manos de una camarilla de familias oligárquicas que manejan este país como su propia hacienda. Familias que volverán a estar en noviembre detrás de las candidaturas que optarán a dirigir la nación.

No le falta razón a Sergio Ramírez para no tener ningún entusiasmo por la vuelta de Zelaya. Sin embargo, el continuismo del gobierno golpista hasta los comicios de noviembre sería una decepción profunda y, sobre todo, una humillación para la gente que ha estado en la resistencia. Los pueblos también necesitan relatos propios que les ayuden a creer en sí mismos y muchos hondureños y hondureñas están escribiendo estos días ese relato. Quizás con faltas de ortografía e incoherencias propias de un país que ha estado sumido secularmente en el subdesarrollo político, pero con sobreabundancia de dignidad.

16 DE AGOSTO: VIENE LA CIDH

A partir de mañana lunes comenzará oficialmente la visita de la CIDH, organismo con sede en Washington que recibe su mandato de la Carta de la OEA y que es reconocido como actor protagónico en el Sistema Interamericano de Derechos Humanos. La delegación que viaja a Honduras estará integrada, entre otros, por su presidenta y vicepresidente. Es la más importante comitiva en esta materia que llega a Honduras desde el 28 de junio, por lo que despierta nuevas expectativas. Los resistentes esperan que suponga una protección real para las personas que padecen la escalada represiva y que vuelva a poner en la escena mundial a Honduras, que ha ido paulatinamente perdiendo raiting en los noticieros internacionales...

La población estaría desprotegida de no ser por la asociación de abogados en resistencia, que está realizando
un trabajo valiente e invalorable. Estos abogados se han hecho presentes en cada posta donde ha habido un detenido y no han dejado que ninguna captura se realice sin interponer el debido habeas corpus.

COMO CARMEN AYALA

Carmen Ayala, de 36 años, es una de las mujeres que clama por la llegada al país de una Comisión que pueda informar imparcialmente de lo que aquí acontece. Desempleada y madre soltera de dos hijos, estudia bachillerato a distancia. Su preocupación por los problemas sociales y políticos que aquejan a Honduras le llegó, como a tantas otras mujeres hondureñas y latinoamericanas, después de un largo proceso personal en que tuvo que liberarse de los prejuicios patriarcales en que fue educada. El pasado viernes, mientras participaba un día más en las marchas de protesta, fue víctima de un ataque con gases lacrimógenos en las inmediaciones de Choloma. Pudo librarse de los efectos de éstos sobre la piel gracias a unas vecinas que solidariamente abrieron sus puertas, la desprendieron de sus ropas y la bañaron inmediatamente. Carmen nunca había visto a estas mujeres y se siente fortalecida con el apoyo recibido de personas anónimas. “Creo que ahora estamos aún con más ganas de pelear que antes”, me cuenta por teléfono...

¿UN AUTOATENTADO?

Durante la madrugada del sábado se registra un atentado contra las instalaciones de “El Heraldo”. Cuatro bombas de fabricación casera son arrojadas en su interior por desconocidos. Este periódico, propiedad de Jorge Canahuatti, ha mantenido una actitud beligerante contra Mel Zelaya desde mucho antes del golpe. Sus denuncias sobre la corrupción del Ejecutivo depuesto han contribuido en buena manera a socavar la credibilidad de Zelaya, pero le han granjeado apoyos entre quienes prefieren el maniqueísmo a profundizar en la verdad de los hechos. Aunque hubiera razones suficientemente justificadas para denunciar al presidente Zelaya, el rotativo no lo hacía por amor a la patria, sino siguiendo la estela que marcan los intereses privados de su dueño, uno de los autores intelectuales de la asonada militar.

Juan Barahona, líder de los resistentes, condena el atentado a “El Heraldo” y ratifica que su lucha es pacífica. Aunque no hay que descartar que una parte de la gente que protesta en las calles se radicalice, lo más probable es que la inteligencia militar esté empezando a hacer uso de estrategias que ya fueron puestas en práctica en los años 80. ¿Será posible que éste sea un autoatentado que justifique posteriormente la captura de algunos líderes de la resistencia?

Se inicia una nueva semana bajo el régimen de facto y una vez más la situación parece estancada. Convendría un poco más de análisis reposado sobre los escenarios que se han creado, impensables hace dos meses. Pero es verdad que cuesta hallar reposo en medio de una dinámica que exige no bajar la guardia. Los golpistas apuestan por el paso del tiempo y la proximidad de los comicios. Mel Zelaya y su equipo siguen de viaje, como cuando gobernaban. Si alguien está negociando por debajo de la mesa, lo desconocemos.

18 DE AGOSTO: ¿SIN MILITARES?

Un creciente número de hombres y mujeres se aprestan cada mañana a librar una lucha interior para no dejarse vencer por el desaliento ni por la creciente represión...

El golpe de Estado, que viene a ser como el acto criminal por excelencia que los engloba a todos, ha disparado la dignidad agazapada de mucha gente. Es como si la población percibiera que si podemos enfrentarnos a un ejército que viola la libertad de toda una nación, también podemos plantar cara a un puñado de sinvergüenzas que se aprovechan de su uniforme para cometer todo tipo de abusos. ¿Sería mucho soñar que los acontecimientos que vivimos sean el principio del fin del militarismo hondureño? Sin militares, quizás fuera más fácil depurar la policía y llegar a tener algún día unas fuerzas de orden público que defiendan la seguridad de la ciudadanía. Sin militares nuestros poderosos lo serían menos.

En un programa de televisión conversan en horas de máxima audiencia el periodista Renato Álvarez y Roberto Micheletti. No es fácil escuchar esta entrevista sin sonrojarse o sentir vergüenza ajena. Descorazona comprobar el perfil intelectual de quienes hoy someten la voluntad popular.

Micheletti nunca fue un hombre de luces. Último eslabón de la estirpe caudillista que ha provocado cientos de estudios en América Latina, está más cerca de dictadores como Estrada Cabrera o Somoza que de Porfirio Díaz. Hasta entre los caudillos autoritarios ha habido personajes que merecen pasar a la historia por algunas virtudes demostradas. No es el caso del progreseño. En estos instantes resulta más evidente que nunca que su función es la de ser testaferro de los verdaderos poderes fácticos de este país. Su discurso es muy limitado y se circunscribe a enfatizar la unidad granítica de no sé qué cosa que cimenta la democracia. Como dijo en cierta ocasión la mamá de un alcalde franquista: “Qué pena, hasta ahora sólo en casa sabíamos que era un incapaz y ahora se va a enterar todo el pueblo”...

Aprovechando el desconcierto, se aprueba en el Congreso una Ley de Agua que viene a consagrar su privatización. Doris Gutiérrez -la única diputada izquierdista que permanece activa en el hemiciclo- se lamenta amargamente: “Nos han metido un gol”. Ha sido golazo. Un sociólogo insinúa que se trata de un pago del Congreso a un sector del empresariado por su apoyo incondicional al golpe. Un pequeño sector que aspira a extender su dominio hasta sobre el agua que bebemos y que no se detiene ante nada.

21 DE AGOSTO:
NOTINADA: UN ÉXITO

Prosilapia Ventura es un personaje de ficción creado por el equipo de producción de Radio Progreso. Es la supuesta reportera del noticiero humorístico “Notinada”, parodia del cerco mediático diseñado por los golpistas en un país “donde no pasa nada”...

En su edición de esta semana los guionistas de “Notinada” bordaron su trabajo en un episodio genial. Hicieron que Prosilapia reviviera las vicisitudes que padeció el periodista Gustavo Cardoza en la manifestación reprimida salvajemente en Choloma la pasada semana y consiguieron reírse, y hacernos reír a todos, con anécdotas que en su origen estuvieron teñidas de sangre y temor. Poder mofarnos del golpe de estado y sus protagonistas no es ninguna frivolidad. Ayuda a la población a tomar un punto de distancia adecuado para no caer en el desaliento. Quizás esta historia nacional no termine como nos gustaría. Pero la ciudadanía hondureña ha subido unos peldaños en cuanto a su participación democrática y los políticos se hunden un poco más en el imaginario colectivo...

Resulta descorazonador comprobar que la mayoría de las emisoras católicas de radio y televisión han optado por no participar. Su silencio es moralmente injustificable, pero en la práctica responde a una máxima sencilla: “Donde manda capitán no manda marinero”. El jefe ya se pronunció y mandó a callar. En esta latitud del planeta, con la sombra aún alargada de Monseñor Romero sobre la tierra centroamericana, la posición del Cardenal Rodríguez nos resulta aún más censurable. Pero probablemente él no se equivocó. Respondió a sus verdaderas convicciones. Y muchos cristianos que están en la base de la Iglesia lo han comprendido rápidamente y han seguido adelante sin él. Tampoco las iglesias podrán volver a ser exactamente las mismas en Honduras. El patrón de poder vertical que apenas se cuestionaba topará en adelante con más resistencias de las encontradas hasta ahora.

¿ES POSIBLE LA NEUTRALIDAD?

Escuchamos en el Teatro La Fragua a Guillermo Anderson, una de los mejores cantautores que ha dado Honduras. Como siempre, consigue impregnar al auditorio de sabor caribeño, pero su concierto no llega a ser tan cálido como otras veces. Faltaba mucha gente de la que solía acompañarlo incondicionalmente en esta ciudad. El acogedor y familiar aforo de este teatro apenas estaba hoy a un 60 por ciento. Anderson se ha granjeado antipatías en los últimos días por su posición de pretendida neutralidad. Entre canción y canción vuelve sobre su argumento: “Mi misión es cantar por encima de los colores políticos”. La miopía de este artista, que no anula su buen trabajo, es la de un sector de la clase media hondureña. Consideran innecesario dar la cara en un conflicto político entre lo que entienden como facciones enfrentadas.

Es cierto que hay rivalidad entre caudillos, pero eso no es todo. Se les escapa que en este momento histórico se juega más que eso. Lo que se escenifica, además, es la resistencia de un pueblo ante quienes se niegan a vivir en democracia y no han hecho otra cosa que obstaculizar cualquier intento de transformar Honduras en un país con un desarrollo humano equitativo. Y ante esta posición de dignidad ciudadana, que además ha sido reprimida violentamente por las fuerzas policiales, no cabe la indiferencia ni la equidistancia.

Pasadas las 9 de la noche nos llegan las primeras noticias sobre las conclusiones de la CIDH. Claramente, constatan el uso de la fuerza desproporcionada por parte de los uniformados, y achacan el desorden que vive el país a la ruptura del orden constitucional acaecido el 28 de junio. Confirman el asesinato de al menos cuatro personas y la detención irregular de centenares. Tampoco se hacen esperar las primeras reacciones del gobierno de facto. Una vez más, el régimen golpista desprecia lo que viene de afuera y acude al argumento de la incomprensión de quienes desconocen nuestra cultura y nuestro peculiar ordenamiento jurídico. Vuelta a empezar. El lunes llegan los cancilleres de la OEA. ¿Se estrecha el cerco o se prolonga el circo?

24 DE AGOSTO:
OÍDOS MUY CERRADOS

Comienza una nueva semana con la expectativa que despierta la visita de cancilleres de la OEA, que llegan hoy al país... Tras la importante labor desarrollada por la CIDH, los cancilleres tendrán un nuevo argumento vinculante sobre el que apoyar su negociación... Se puede esperar que la OEA advierta al régimen de Honduras de las sanciones y serias consecuencias que traería consigo no llegar a un acuerdo político, el que pudiera derivarse de la mediación de Arias.

El juez Baltasar Garzón llega también a Tegucigalpa para una conferencia sobre el sistema internacional de justicia. Aunque ha expresado que viene como invitado y no tiene intención de intervenir judicialmente en la situación creada en Honduras, a nadie se le escapa que ha sido el hombre que enjuició en su día a Pinochet y cabe preguntarse si Micheletti podría encontrarse algún día en la situación del chileno si sale de Honduras. Esto no parece inquietar mucho al progreseño, un hombre sin demasiadas pretensiones cosmopolitas.

También se prepara para hoy, por las fuerzas que apoyan a Micheletti, un plantón por la “dignidad nacional”
frente al hotel donde estará alojada la delegación extranjera. Constitución, democracia, libertad y dignidad son palabras objeto del más burdo manoseo en este episodio que vivimos desde hace ocho semanas. Otra perversión más, la del lenguaje, a añadir al listado de infamias de esta clase política que, con tal de no ceder sus posiciones, no dudan en llevarse de encuentro a todo un país.

El novelista Julio Escoto ha puesto sobre la mesa estos días el tema del petróleo que supuestamente se habría encontrado en la Costa Atlántica. Cree que es un factor descuidado por los analistas y que podría estar entre los motivos de los golpistas.

MACROCONCIERTO EN TEGUS

Ayer domingo, en los predios de la Universidad Autónoma en Tegucigalpa, se celebró un macroconcierto con la presencia de varios grupos nacionales y algunos internacionales. Entre ellos destacaron los argentinos “Las manos de Filipi” y el mítico conjunto venezolano “Los Guaraguaos”. Eduardo, vocalista guaraguao, alaba el valor de la ciudadanía hondureña: “Ustedes son un ejemplo para todos nosotros”. Me llama una amiga que no pudo ir al concierto porque necesita terminar unos trabajos de costura para alimentar a sus dos hijos. “Es que todavía no me han enviado el cheque los de las FARC”, me dice con evidente sorna. Da la impresión que la gente se siente orgullosa de ser objeto de las calumnias de los periodistas corruptos. Son hombres y mujeres casi sin estudios, pero saben perfectamente que se están enfrentando al poder mediático y no sienten temor por ello.

No se sabe con exactitud el número de gente congregada en el concierto, pero nadie podrá negar que en algunos momentos de la tarde hubo decenas de miles de personas. Es una multitud inimaginable en Honduras para un acto público. En horas de la noche, el Padre Andrés Tamayo subió al estrado y propuso una sencilla oración. Con las luces apagadas, miles de personas elevaron su celular encendido como antaño se hacía con las candelas. Fue un momento emocionante. Un regalo para tanta gente que tras ocho semanas sigue creyendo que nos merecemos un destino mejor...

25 DE AGOSTO:
DAN LA ESPALDA A LA OEA

Este día ha resultado una jornada cargada de acontecimientos, unos más esperanzadores y otros más amargos. Nuevas manifestaciones en las calles, reuniones de alto nivel, declaraciones formales y ruedas de prensa. Apenas da tiempo a recomponer todas las piezas. Parece imposible que llevemos casi dos meses en este despropósito. El sabor con que se cierra el día es de una inevitable desazón. Micheletti da la espalda a la comisión de la OEA, que se marcha por donde ha venido, con el único recurso de recomendar unas sanciones que no aclaran en qué consistirían. En un tono dramático, el Presidente de facto les asegura: “No necesitamos su ayuda ni la de nadie para salir adelante”...

Estados Unidos suspendió esta mañana el servicio de visas en Honduras, como medida para presionar los esfuerzos de negociación de la OEA y del presidente Arias. El Ejecutivo aclara que esperaban esta medida y la minimizan entre gestos y palabras nerviosas, que tienen algo de ingenua puerilidad. Horas después, en un hotel capitalino, la comisión delegada de la OEA brinda una conferencia de prensa en la que anuncia que no ha conseguido sus objetivos y que Zelaya habría aceptado todos los puntos propuestos por Arias.

¿QUÉ VA A PASAR?

En pocos días comienza oficialmente la campaña electoral. Los poderes fácticos que apoyan el golpe confían en llegar hasta noviembre y pasar de puntillas sobre este desagradable momento histórico para que todo quede como estaba antes de que Zelaya se enredara en su patastera ideológica. ¿Será posible? A pesar de la impresionante acometida mediática, mucha gente que ha abierto los ojos no parece estar ahora dispuesta a cerrarlos sin más. El apoyo internacional también los ha envalentonado. Miembros anónimos de una sociedad que se sabe a sí misma desestructurada y poco capaz de generar cambios, se encuentran por primera vez en el foco de la atención internacional... Esta noche nadie puede imaginar una salida a la vista que resulte alentadora. La violencia y la profundización de la miseria son lo único seguro si el conflicto no se desentrampa.

28 DE AGOSTO:
DOS MESES QUE AGOTAN

Terminamos el segundo mes bajo un régimen político espurio surgido de un golpe de Estado que nos resultaba imprevisible por anacrónico sólo unos días antes de producirse. Ni los más pesimistas suponían que la derecha empresarial podría dar un vuelco tan violento a la vida política hondureña. Sabíamos que la democracia era frágil, pero no nos imaginábamos que el cascarón se hallaba tan vacío.

No es fácil descifrar el significado exacto de la maraña de sentimientos que hoy inundan a la población. ¿Amargura? Sin duda. Tras 60 días de resistencia, con al menos cuatro muertos fruto de la represión, cientos de detenciones ilegales y miles de golpizas y violaciones, escuchar a Micheletti invocar su fe en Dios para sostenerse frente al bloqueo internacional que ya ha comenzado, resulta difícil de digerir.

¿Impotencia? Cómo no sentirla cuando tras cientos de manifestaciones populares, los periodistas tarifados siguen hablando de turbas violentas financiadas por el chavismo. ¿Repulsa? Es inevitable. ¿Han visto ustedes a Ortez Colindres dando declaraciones sobre ese “club de borrachos” llamado OEA? Indefensión también se percibe mucha. Anteayer mismo era asesinado un joven de 17 años en Tegucigalpa, miembro de las juventudes de UD y activista en la presente crisis. Aunque no hay evidencias de que su muerte tenga causas políticas, tampoco hay forma de demostrar lo contrario, con una Fiscalía y un Comisionado de Derechos Humanos completamente manejados por las estructuras del régimen de facto...

La incertidumbre sigue aún presente. Desde ayer corren nuevos rumores de que Micheletti podría ser obligado a dimitir por los mismos que lo apoyaron, siendo sustituido por una junta de notables. La presión que ponga en este momento el Departamento de Estado de Estados Unidos es clave para que este gobierno se derrumbe o se mantenga... Por momentos hay sensación de agotamiento. Es muy de agradecer que la solidaridad internacional siga llegando, tanto de parte de comisiones diplomáticas como, sobre todo, con el testimonio anónimo de hombres y mujeres de todo el mundo que nos transmiten su aliento.

“OIGO UN RUIDO QUE SUENA...”

También hay esperanza y hasta alegría. En el marco de los dos meses del golpe de Estado se celebran varias marchas y manifestaciones en todos los puntos del país. En un país donde la apatía política ha sido el canon, hay una primavera de participación. Tegucigalpa se dispone hoy para otra concentración humana. Para este sábado se programa una gran caravana de vehículos que partirán de San Pedro Sula. En esta ciudad norteña se registra hoy una manifestación de estudiantes contra la nueva ley del servicio militar que, aunque de momento ha sido “aparcada”, preocupa sobremanera a los jóvenes. Hoy hay concentraciones en Estados Unidos. En Atlanta, Nueva York, Houston y Boston habrá plantones de apoyo organizados por hondureños y hondureñas que viven en ese país. Al interior de la república se multiplica el listado de actividades: una misa en Santa Bárbara, un acto público en Santa Rosa, un plantón en El Progreso, un concierto en Siguatepeque…

El movimiento de resistencia ya no es el que se puso en marcha el 28 de junio. Es mucho mayor y, sobre todo, mucho más complejo. Va mucho más allá de exigir la restitución de Zelaya. Empieza a ser un movimiento que vibra por una democracia auténtica. El escritor Jorge Luis Oviedo lo ha expresado en un poema ayer mismo: “Oigo un ruido, que suena, que suena, que suena…” Algo se ha movido y eso no admite dudas, aunque probablemente habría que ser cautos con lo que ese sonido nos permitirá avanzar. Así como tenemos una oligarquía que juzga cada reducto amenazado como una tragedia, nuestro movimiento popular ha dado muestras en el pasado reciente de una candidez fuera de lo común...

62 días de lucha son un capital notable. Pero algo nos indica que esto no basta, que la resistencia precisa renovarse para seguir siéndolo. Es posible que la situación precise urgentemente de nuevas estrategias. Cerrado el régimen sobre sí mismo, si se sostiene ante las más recientes presiones, y con el comienzo de la campaña política el día primero de septiembre, hay que empezar a alcanzar la mayor unidad.

¿Aprovecharán las dos candidaturas opuestas al golpe el posible tirón popular de este momento para tratar de sacar una buena renta electoral o le darán la espalda a unos comicios que están viciados de raíz? Ésta es una de las respuestas que habrá que dar en breve para que el movimiento de resistencia no caiga en un conflicto interno de intereses. Ya importantes sectores de la resistencia se han pronunciado en contra de participar en las elecciones. Pero convendría una respuesta unitaria y, sobre todo, meditada hasta en sus últimas consecuencias, Si se toma esa decisión, hay que contemplar los escenarios posibles a los que nos abocamos, algunos de ellos muy complejos, y medir las fuerzas con las que contamos, así como los apoyos externos.

Por otra parte, parece necesario empezar a desarrollar una mayor capacidad propositiva. Los retos económicos a que nos enfrentamos hacen necesario que la resistencia tenga algo más que aportar que el descontento en las calles. Ésta es una asignatura pendiente del movimiento popular hondureño y de la izquierda política en este país. Es también un reto para la derecha democrática, si es que existe. No se puede vivir de la nostalgia ni alimentarse gratuitamente del itinerario marcado por otros países de la región. Existe un déficit histórico en cuanto a la capacidad de la oposición al bipartidismo para elaborar propuestas viables que tengan calidad técnica para erigirse en alternativas de políticas a las de la oligarquía dominante. Sería importante que la cooperación internacional pudiera encontrar la manera de apoyar esfuerzos por consolidar una sociedad civil propositiva.

2009 será un año clave para la historia nacional. El 28 de mayo Honduras sufrió el peor terremoto en décadas, pero milagrosamente, las pérdidas humanas fueron mucho menores que las que un sismo de 6.1 puede provocar. Un mes después, el 28 de junio, se produjo este otro sismo, mucho más violento que el geológico, que aún nos mantiene temblando de angustia y esperanza.

COMUNICADOR POPULAR.

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